A las 05:20:28 UTC / 02:20:28 hora local de Brasil, el Team Malizia cruzo línea de meta frente al Ocean Live Park en Itajaí para ganar la etapa 3 de The Ocean Race, llevándose 5 puntos por el triunfo.
La victoria llegó en el día 35 de competición, después de navegar 14.714 millas náuticas una etapa intensa y luchada cuerpo a cuerpo.
«Todavía estamos con la energía a tope”, afirmó el patrón Boris Herrmann al llegar al pantalán con su equipo. «La competición ha estado muy igualada y eso te mantiene motivado. Esta es una victoria de todo el equipo y estoy muy orgulloso de lo que hemos logrado”.
Al principio de la etapa, parecía poco probable que el Team Malizia estuviese en cabeza de la flota en la llegada.
A los pocos días de la salida en Ciudad del Cabo, el equipo descubrió una grave rotura en la parte superior del mástil y tuvo que dedicar casi dos días completos a realizar una complicada reparación en el mar, con un resultado incierto.
«Cuando pienso en ese día, nada más salir, en el que perdimos una vela y tuvimos la rotura el mástil, recuerdo que pensamos en volver a Ciudad del Cabo», reconocía Will Harris, reflexionando sobre la difícil situación al principio de la etapa.
En ese momento, el Team Holcim-PRB se había escapado del resto de la flota y estaba casi 600 millas por delante de sus rivales.
A bordo del Malizia, el refuerzo improvisado que hicieron en la parte superior del mástil tuvo éxito y comenzaron la persecución.
Cuando los equipos llegaron a la puerta puntuable de la Etapa 3, el Malizia se había acercado a menos de 200 millas del Holcim-PRB, subiendo al segundo lugar y llevándose 4 puntos.
A medida que la flota navegaba por el sur de Nueva Zelanda y bajaba hacia la zona más al sur del Océano Pacífico, su particular batalla se igualó y las ventajas se movían en torno a las 10 millas para uno u otro barco, que se intercambiaban el liderato mientras navegaban a lo largo de la zona de exclusión de hielo.
Durante uno de los peores períodos de la etapa, con el barco dando tumbos con un estado de mar muy violento, Rosalin Kuiper voló despedida de su litera y sufrió una herida en la cabeza. Con el objetivo de lograr que Rosie se estabilizara y se recuperara, el Malizia tuvo las cosas aun más difíciles, ya que se quedó con una rotación para las guardias de tres personas para el resto de la etapa.
«Estoy bien. Me estoy recuperando. Todavía no del todo, pero estoy bien y feliz de estar aquí con todos», dijo Kuiper a su llegada.
En el paso por Cabo de Hornos el Team Malizia tenía una estrecha ventaja de menos de 30 millas, liderando a la flota alrededor de este emblemático punto y ganando el trofeo Roaring Forties (Cuarenta Rugientes) en el proceso.
El apretón final hacia el norte estuvo muy igualado. El Team Holcim-PRB y el Team Malizia navegaban viéndose entre ellos, subiendo proa con proa toda la costa sudamericana.
La penúltima noche, el pasado viernes, lidiaron una batalla contra otra fuerte tormenta, con rachas de 50 nudos aullando desde la costa y azotando un mar embravecido. Boris Herrmann y su Team Malizia manejaron las condiciones con aplomo y amanecieron con una ventaja de 60 millas después de que el Holcim-PRB pinchara en una trasluchada durante la noche y sufriera algunos daños. Esta fue la ventaja más grande que lograba un equipo desde pasaron por Nueva Zelanda, hace más de 10 días.
«Estábamos esperando para ver si el Holcim PRB cometía un error», dijo Harris. «Han estado pisándonos los talones todo el camino desde Cabo de Hornos. Pero al final cometieron un pequeño error y ese fue el momento para aprovechar nuestra oportunidad y construir una ventaja para llegar a Itajaí con una victoria».
En el último día de la etapa y en la última noche en el mar, el Team Malizia navegó rápido y confiado hacia la línea de meta, ampliando su ventaja a más de 80 millas y logrando una victoria histórica.
Felicidades a Boris Herrmann, Will Harris, Nico Lunven, Rosalin Kuiper y al reportero a bordo Antoine Auriol y a todo el Team de Malizia por su victoria.
«Estoy súper feliz de estar en Itajaí, pero si pudiera elegir, iríamos y saldríamos de nuevo», dijo Kuiper. «Nos hemos divertido mucho y ha sido, con mucho, la navegación más épica de mi vida”.
“Llegar aquí primeros es un sueño hecho realidad. Ha sido una pelea muy larga, hasta la misma meta, y estoy muy orgulloso de este equipo. Es una sensación increíble», concluyó Harris.
«Es muy bonito obtener la victoria», coincidió Nico Lunven. “Estuvimos muy cerca de volver a Ciudad del Cabo. Pero Will y Rosie hicieron un trabajo increíble subiendo al mástil para hacer la reparación y eso nos permitió volver a la acción y ganar al final”.