La semana pasada la embarcación Blue Panda de WWF llegó a Marina Port Ibiza como último destino de su campaña de protección de reservas marinas en Baleares, esta vez con objetivo: Tagomago, una reserva que protegía desde el 2018 que ya esta mostrando señales de recuperación.
La embarcación, ha utilizado Marina Port Ibiza como puerto base y punto de encuentro para recibir a residentes y diferentes grupos de interés, y dar a conocer su campaña de conservación de las reservas marinas y los beneficios que supone tanto para el ecosistema como para los ibicencos el tener una como la de Tagomago, en la cual habitan multitud de especies marinas.
José Luís García Varas, responsable del programa marino de WWF nos cuenta el objetivo de esta campaña, que es proteger un 30% del mar Mediterráneo desde este momento hasta 2030. Un objetivo que solo será posible, a través de la concienciación de los diferentes grupos involucrados tales como organizaciones gubernamentales, cofradías de pescadores y ciudadanía, que son los principales implicados en que esta protección de áreas marinas sea viable.
Ibiza ha sido uno de los puertos elegidos para esta campaña por un motivo claro, nos cuenta José Luís “debido a la insularidad, las islas dependen de un mar sano. Ya que muchas de las actividades económicas en Baleares están enfocadas en el mar y dependen de él, es fundamental mantener el buen estado ambiental de ese espacio marino.”
Según nos apunta José Luís, “la reserva marina de Tagomago, protegida desde hace tres años, está mostrando síntomas de recuperación en cuanto a biomasa de especies comerciales en las zonas de protección total, donde está prohibido pescar durante todo el año. Esto es muy buena señal. Durante esta visita a la isla, se ha visto la necesidad de ampliar la extensión de esta reserva para que el efecto de protección sea aún mayor.”
Una de las misiones que tenía el Blue Panda durante su estancia en la marina, a parte de las diferentes charlas y reuniones, era la retirada de una red de pesca trampa que flotaba en el agua de Ibiza, pero debido a la mala mar de estos días les ha sido imposible su retirada, quedando así pendiente para la próxima visita a la isla.