‘Horonuku’ llamado por Ngāti Whātua Ōrākei que significa ‘deslizarse rápidamente por la tierra’ hizo exactamente eso y registró una velocidad de 222,4 km/h con 22 nudos de velocidad del viento en el lago Gairdner en el sur de Australia. El piloto Glenn Ashby estaba claramente contento con la carrera, pero también moderado al saber que Horonuku puede ir mucho más rápido. “Obviamente, el equipo y yo estamos entusiasmados por haber navegado Horonuku a una velocidad más rápida que nadie antes, impulsado solo por el viento. Pero al decir eso, sabemos que Horonuku tiene mucha más velocidad cuando tenemos más viento y mejores condiciones”. Dijo Ashby. “Entonces, seguro que hay un motivo para una celebración, pero este no es el final. Desde la idea inicial y el comienzo de este intento de récord mundial, que fue impulsado y apoyado por Grant Dalton, Matteo de Nora y el resto del equipo del Emirates Team New Zealand, el objetivo nunca ha sido solo batir el récord, siempre ha sido se trata de llevar las cosas al límite e ir lo más rápido posible. Sabemos que podemos ir más rápido, así que planeamos hacerlo”.
